¿El parkour es solo para chicos?
Está claro que no. El parkour lo practican hombres y mujeres de todas las edades, pero fijémonos en los números para entender esta evolució
Tratando de averiguar cuántas mujeres hay realmente en esta práctica proveerá una base desde la que investigar esta cuestión más amplia.
Una búsqueda rápida de imágenes en Google con la palabra ‘parkour’ nos da como resultado:
Siluetas épicas de hombres realizando (principalmente) saltos atrevidos con una condición física inimaginable.
Las imágenes evocan una idea muy masculina de superhéroe, que es una representación típica de los estereotipos masculinos más comunes asociados al parkour: riesgo, músculos, y hombres.
Pero para aquellos que practican y enseñan el parkour, y de hecho, quienes adoptan sus principios como estilo de vida, estos resultados son un malentendido que daña la reputación de nuestra disciplina.
Cualquiera puede hacer parkour
Sí, incluso tu propia abuela. Mi madre no es una abuela atlética (perdona mamá) y ella ha participado en su primera clase de parkour a la edad de 60 años.
El parkour consiste en familiarizarte con tus capacidades físicas actuales (sean cuales sean) y aprender a usar tu cuerpo para superar obstáculos a cualquier nivel que, siempre con seguridad, supongan un reto al alcance de tus posibilidades físicas.
Cuando empecé a practicar parkour, no podía hacer una sola flexión ni para salvar mi vida. Nunca había sido capaz de hacerlo, y nunca soñé que llegaría el día en que sería capaz de hacer dominadas usando solo tres dedos de cada mano. Ganar fuerza me dio la impresión de ser lento al principio, pero fue una parte sólida e inherente del desarrollo de mi entrenamiento de parkour; nadie se despierta de un estilo de vida sedentario un día, decide hacer un mortal hacia atrás y vive para contarlo. En lugar de hacer repeticiones aisladas en una máquina, estuve aprendiendo a saltar a cajas de madera, hacer equilibrio en barandillas, y escalar muros verticales.
Conforme estuve más integrada en la comunidad de parkour, empecé a impartir clases en Parkour Visions en Seattle, y asistí a RTs (RT o jam: grandes quedadas de practicantes de parkour que acuden al mismo lugar para saltar por todas partes), me di cuenta de que no había mucha gente parecida a mí. La comunidad de parkour parecía más centrada en los hombres cuanto más aprendía de ella.
Algunos estaban sorprendidos de que los números fueran tan bajos. De 1.936 participantes durante un periodo de cinco años, solo 268 eran mujeres. Otros asistentes al encuentro dijeron que la cifra sería incluso más baja. Teniendo en cuenta que las mujeres comprenden poco más del 50% de la población de los Estados Unidos, no hay motivos para que estemos viendo esta gran brecha. Las discusiones que tuvimos a continuación revelaron que las mujeres tienden a tener una idea detallada de lo que significa estar infrarrepresentadas en la disciplina, cada una con nuestra propia historia sobre sentirnos marginadas o sufriendo de imposter syndrome (síndrome de impostor). Por contra, los participantes masculinos expresaron una variedad de preguntas y preocupaciones sobre el tema. Algunos estaban formados en técnicas que funcionaban bien con alumnas de parkour. Otros tenían fuertes convicciones que parecen estar enraizadas a la defensiva; la mayor parte con un polémico rechazo hacia las clases de quedadas de parkour exclusivas de mujeres.
Las razones por las cuales tan pocas mujeres se sienten atraídas por el parkour y permanecen involucradas en la comunidad una vez que han empezado a practicar son una miríada y muy complejas. ¿Cuáles son las barreras de entrada, y qué podemos hacer para incrementar la inclusión y permanencia de mujeres y chicas en la práctica? Esta es la próxima pregunta obvia que debe ser respondida en el camino hacia una mayor representación femenina, y será el tema de mi próximo post. Por ahora, sencillamente absorbamos ese número (13.8%) y comprometámonos a incrementarlo.
Tanto si eres chico o chica, y tienes entre 3 y 65 años, no olvides apuntarte a nuestras Clases de Parkour totalmente eficientes y seguras.
